Hackfeminismos para hacer frente a la dominación colonial, capitalista y heteropatriarcal en internet
Internet Ciudadana
Miércoles, Septiembre 23, 2020
Foto: FCINA

¿Qué es el hackfeminismo? ¿Qué impacto tienen las redes 5G sobre las mujeres y las diversidades? ¿Cómo descolonializar y despatriarcalizar una tecnología construida por hombres blancos del Norte? ¿Cómo abordar el cuidado de las mujeres, niños y diversidades en la red? ¿Qué son las futurotopías? ¿Cómo sostener infraestructuras comunitarias y feministas?

Estos temas y varios otros fueron desarrollados en el webinario “Hackfeminismos Utópicos”, organizado por el espacio Internet Ciudadana en el marco del ciclo “Tendencias y Alternativas de la era digital”.

A exponer sobre los temas fueron invitadas desde México Loreto Bravo, del programa de Acompañamiento en Seguridad Digital de Digital Defenders Partnership; desde Ecuador Anais Córdova-Páez de la organización Taller de Comunicación Mujer, a cargo del programa Navegando Libres por la Red y la colombiana Tatiana Avendaño, filósofa transhackfeminista, raver, practicante de seguridad digital y aprendiz de telepatía y clarividencia.

Loreto Bravo explicó como las empresas nos están vendiendo la idea de hiperconectividad a través de las redes de quinta generación (5G) y el Internet de las cosas, traspasando la frontera personal-íntima e invadiendo nuestros cuerpos y nuestras mentes.

En relación a los cuerpos de las mujeres, “esto es preocupante porque permite que los hombres, que en gran medida desarrollan y comercializan estas tecnologías, accedan a nuevos “datos”, nutriendo sus algoritmos con las emociones, estados psicológicos y bioritmos de las mujeres, con el potencial de convertirse en un mecanismo de control y manipulación de los estados psicoemocionales y corporales”, señaló.

Añadió que “un desafío importante que tenemos como sociedad es comprender que las empresas que dominan el diseño y desarrollo de las tecnologías digitales que hoy construyen esta nueva realidad están vinculadas de forma directa con una lógica colonial, capitalista y heteropatriarcal”.

Para afrontar esta situación, la hacker y comunicadora popular propone introducir un enfoque psicosocial al análisis de estos fenómenos que nos ayude a comprender cómo “los argumentos científicos y la racionalidad positivista juegan un papel fundamental en la proliferación y legitimación de las tecnologías digitales” al tiempo que “los mecanismos de normalización están directamente vinculados a las dinámicas de poder dentro de la sociedad”.

Finalmente, exhortó a “atrevernos a pensar desde la lógica de la vida comunitaria las tecnologías que nos permitan ejercer la libertad de defendernos, protegernos y avanzar de forma colectiva.”

Por su parte, Anais Córdova-Páez expresó que “la violencia de género en el ámbito digital es una forma de discriminación, acoso, explotación, abuso y agresión que se produce a través del uso de redes sociales, correo electrónico, celulares y cualquier medio dentro de las tecnologías de la información y comunicación (TICS), que conlleva diferentes afectaciones a nivel físico, psicológico, sexual y económico.”

Indicó además que estas violencias afectan principalmente a mujeres, niñas, niños, adolescentes y personas LGBTI debido a la reproducción de relaciones de poder que se dan en contextos de desigualdad social.

Córdova-Páez, quien coordina el eje de acompañamiento a víctima de violencia de género digital de la organización Taller de Comunicación Mujer, hizo referencia al enlace https://www.navegandolibres.org/ para acceder a los tipos de violencia que han tipificado.

Otra cuestión que abordó fue la brecha de género en las tecnologías en Ecuador, que se ve representada en una de cada diez mujeres.

“Queremos mitigar la violencia a través del acompañamiento feminista de las agresiones que se dan por medio de las tecnologías, es por eso, que buscamos un internet más equitativo, un internet feminista.”, puntualizó

Agregó que “las tecnologías deben ser espacios cómodos, seguros, para que nosotras habitemos. Además las tecnologías deben ser hechas, pensadas por nosotras, desde nuestras necesidades, es decir tecnología feminista”.

Para finalizar, afirmó que “desde pequeñas escuchamos frases como las mujeres no son buenas para las máquinas, los hombres son buenos para las matemáticas, etc… Este tipo de estereotipos de género deben acabar, recordar la historia de las mujeres, desde las tecnologías y preguntarnos como vamos a construir otras maneras de habitar la tecnología”.

A su turno, Tatiana Avendaño develó el significado de transhackfeminismo: trans, como referencia a la transformación, transgresión y transitoriedad; hack, en el sentido de producir algo nuevo, darle la vuelta algo para usarlo de una manera diferente. “Podemos y sabemos hackear no solo la tecnología, también los cuerpos, las leyes, las cosas, los mercados, los patrones de comportamiento”, afirmó.

Amplió la perspectiva, señalando que “no solo han sido explotados los cuerpos de las mujeres, la marginalización y explotación de la vida se ejerce sobre otros cuerpos, otros seres vivos y sobre la tierra. Es decir, el deseo de posesión y control opera sobre la totalidad de la vida.”

A través del concepto de futurotopías, incitó a la búsqueda de “imaginarios liberadores y la especulación que nos permite prefigurar los tipos de tecnologías, tecnociencias e infraestructuras necesarias para (re)imaginar y buscar transformaciones sistémicas”.

Las futurotopías, precisó, son una invitación a afrontar con prácticas e imaginarios especulativos, políticas decrecientes y feministas, acciones alegres y ternura radical, “un mundo que parece ir de mal en peor, donde las opciones, los imaginarios y los futuros que nos proponen oscilan cada vez más entre el cinismo y la distopía.”

Estas son herramientas políticas que “históricamente le han permitido a los feminismos imaginar el mundo que deseamos vivir, porque los referentes actuales están agotados y cargados de patriarcado”, concluyó.

En la continuidad de los debates y acciones de sensibilización para la democratización de internet que lleva adelante el espacio latinoamericano-caribeño Internet Ciudadana, la moderadora del evento Blanca Diego (Lola Mora Producciones) invitó a acompañar el proceso de las Jornadas “Utopías o distopías. Los pueblos de América Latina ante la era digital”.

Estas Jornadas aspiran a fortalecer un proceso de carácter latinoamericano orientado a profundizar la comprensión del contexto de las nuevas sociedades digitalizadas y a propiciar encuentros y diálogos entre distintos sectores y organizaciones que se plantean luchas en este ámbito, para identificar pistas de estrategias comunes.

Su objetivo es interconectar las luchas parciales, sectoriales o locales entre ellas y con otras regionales o globales, para identificar conjuntamente qué estrategias permitirán ganar fuerza colectiva y atacar el problema en sus puntos neurálgicos, incluyendo demandas y propuestas populares de políticas públicas para frenar el poder excesivo de las corporaciones digitales.