La directiva de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) desde su sede en Ecuador reconoció el respeto a la democracia y la fuerte institucionalidad que la respalda en Venezuela tras los recientes comicios parlamentarios.
A criterio del presidente de Unasur, Ernesto Samper, el organismo de integración regional cumplió con su objetivo pues la misión electoral que fue cuidadosamente preparada para realizar una labor de acompañamiento pudo estar presente en 11 estados venezolanos.
Podemos constatar sin ninguna duda que estas han sido las elecciones más transparentes y más efectivas de todas las que ha acompañado Unasur, afirmó.
Como resultado de los comicios parlamentarios efectuados la víspera en Venezuela, donde la alianza de partidos de oposición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) obtuvo la mayoría de los curules en la Asamblea Nacional, Samper habló en conferencia de prensa de un cambio de equilibrios internos.
El cambio de la composición de las fuerzas en el Parlamento es evidente, estimó, y también ha planteado un cambio en los propios equilibrios entre el poder Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial.
Nosotros creemos que en esto consiste la democracia, hay unos que ganan y otros que pierden, pero los unos y los otros se tienen que entender pasadas las elecciones para sacar adelante retos comunes, sostuvo.
Samper, a nombre de Unasur, planteó como principal reto común en este momento sacar adelante la economía venezolana y para ello convocó a un diálogo nacional.
Queremos hacer de manera pública el llamado que ya hicimos en privado tanto al gobierno como a las fuerzas de oposición para que se encuentren caminos a través de los cuales puedan comenzar a superar las dificultades de orden económico que hoy día están agobiando a los venezolanos, apuntó.
El presidente de Unasur calificó de noble y democrática la actitud del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, al reconocer de manera rápida y contundente los resultados de las elecciones, tal y como lo había ofrecido antes de los comicios.
Además, Samper defendió el derecho de cada país a elegir las alianzas estratégicas que considere más convenientes en función de sus intereses económicos, siempre y cuando no se alejen de la integración política regional.
Estos giros, que de alguna manera van a cambiar, las alianzas comerciales y económicas de los países, no tienen por qué afectar la estructura fundamental de Unasur, que es una alianza de carácter político, manifestó.